Aparentemente hubo un descuido de los propietarios de esos cuadrúpedos.
Se informó extraoficialmente que un joven se subió a un árbol cuando conoció de la noticia.
Precisa la información que son dos leones (macho y hembra) y que ambos se salieron de su habitad ubicada en una Villa en Copey-Altamira y que son propiedad supuestamente de la familia Turbi.
Amplios sectores de Altamira han mostrado preocupación por la situación, aunque se informó que todo está bajo control.